Reto 3 "Decálogo #INAPGobiernoAbierto

Es bien difícil redactar un Decálogo de valores, para lo que sea, pero más difícil va a ser ponerlo en práctica y mantenerlo activo cada uno en nuestras instituciones, sobre todo porque muchas de las iniciativas planteadas están en el centro de poder. No obstante, seamos optimistas porque, seguro, podemos cumplir muchos de los puntos que en él están recogidos.

De todas las aportaciones hechas, he reconocido una como la base de lo que debe poseer un empleado público y esto es vocación de servicio. Es indiscutible. No es posible que ninguna institución crezca si sus empleado no la tienen, por el contrario, se convertirían en un lastre que la arrastrarían a los últimos puestos de cualquier ranking.

Otro de los puntos que he considerado es la retención de talento en la Administración. Claro, ¿qué institución no lo haría? Pues a lo mejor, más de las que parece. Aquella institución que no cuide a sus empleados talentosos, cada uno en su área, está condenada a permanecer estancada en el modo "siempre se ha hecho así". Pero en este punto, sinceramente, no soy muy optimista.

Siguiendo en esta línea, otra de mis opciones ha sido la actualización de la relaciones de puestos de trabajo adaptándolas a las necesidades de una administración moderna. Me temo que aquí, tampoco soy optimista pero tal vez se trata de un conocimiento algo estrecho ya que veo que otras administraciones hacen muchas cosas por abrirse a la sociedad. Trataré de actuar a modo de termita, poco a poco, tratando de contagiar estos fundamentos del Gobierno Abierto, Transparencia, Participación, etc. hasta ver a mi institución con una RPT realmente adaptada.

Sin separarme mucho de la temática, he escogido otra propuesta relacionada con el funcionamiento interno de una administración: la participación desde dentro con grupos de trabajo de funcionarios. ¡Claro! Si no empezamos por dentro, en pequeños círculos que luego puedan propagarse ¿cómo vamos a llegar a la sociedad?

Y ya, centrándome en la participación, me ha parecido interesante la propuesta de aplicar la metodología Mapa de afinidades en un entorno universitario, que también es el mío. En mi opinión, una Universidad, como administración, no es comparable a otras con muchos más campos de actuación por eso considero esa metodología una buena fórmula para sacar adelante retos concretos e iniciar en esto de la participación a un colectivo tan importante como los estudiantes universitarios para que sean ahora y en el futuro ciudadano críticos.

Y yo colocaré el Decálogo en un lugar bien visible, por mi y por mis compañeros.